Violencia en mi ciudad

La vida no está comprada, eso es un hecho, a cualquiera nos puede tocar morir. Ya sea en un accidente, por enfermedad, partido por un rayo o aplastado por un asteroide, ciertamente es natural desde el momento de nacer. Lo que ocurre últimamente en Acapulco no tiene nombre, asesinatos, vendetas, venganzas, drogas, esta ciudad era un paraíso y ahora ¿que tenemos? Una versión de Chicago al más puro estilo del tercer mundo. El último en morir fue un conocido periodista conocido como Amado Ramírez el pasado 6 de Abril del 2007. No voy a poner su biografía por acá, todos los que nos dedicamos a la comunicación la sabemos bien, más bien es algo mucho más personal.
Yo conocí a Amado Ramírez en las oficinas de Radiorama, aunque antes lo había conocido en un periódico de esta ciudad. Honestamente nunca fue santo de mi devoción, sus años de servicio en el gobierno lo colocaron como divina garza del periodismo.
Incluso un mes antes de que lo mataran, estuve a punto de trabajar con él, por cierto, únicamente les daba sueldo a sus empleados sin prestaciones... Sin sugerir que por eso se merecía lo que le sucedió.
Hace poco he pasado por el Hotel California, en el centro. Todos hemos pasado por ahí, no es un lugar olvidado o perdido en una colonia peligrosa, es solo una cuadra de Radiorama, dos de la catedral, de Bancomer, etc, etc, fue deprimente ver el lugar y pensar en lo que le pasó.
Antes ya he perdido un primo en aquel incidente en la Quebrada donde ejecutaron a cuatro personas (tengo el vídeo porque tuve que cubrirlo) y eso me sensibiliza. ¿Cuanto tiempo va a continuar la violencia antes de que me afecte directamente? En Acapulco jugamos a la lotería todos los días y seguir vivo es el premio.

Asesinan al corresponsal de Televisa Amado Ramírez en pleno Centro de Acapulco

Lourdes Chávez , Ezequiel Flores Contreras y Teresa de la Cruz / Acapulco / Chilpancingo
El corresponsal de Televisa Amado Ramírez Dillanes fue asesinado ayer por un hombre
solitario en la calle La Paz a una cuadra de la Catedral, cuando salió del edificio Nick, en el
Centro de Acapulco. El reportero cayó herido de muerte en la puerta de entrada del hotel
California. Allí estuvo alrededor de 20 minutos vivo pero finalmente falleció.
Un reporte al teléfono de emergencia 066 de que un hombre herido de bala estaba tirado
en el Centro del puerto movilizó a una ambulancia de socorristas.
Testigos indicaron que el asesino de unos 25 años esperaba al periodista que todos los
días estacionaba en ese lugar su automóvil para ir a las instalaciones de Radiorama,
donde conducía el noticiero Al Tanto. Señalaron que el sicario se acercó al reportero y le
disparó cuando éste subió a su automóvil Focus de color negro con placas de circulación
HAM-5213 de Guerrero.
Se añadió que el asesino huyó a pie mientas Amado Ramírez intentó resguardarse en el
hotel California, pero cayó en la puerta de la hospedería. Afuera quedó el automóvil
encendido y la puerta del conductor abierta, y alrededor seis cascajos percutidos, según la
policía municipal, calibre .38 Súper.
Por su parte, el secretario general de Gobierno, Armando Chavarría Barrera aseguró por la
noche que la Procuraduría General de Justicia del Estado ya estaba investigando los
hechos y que se pondrá “mucho empeño” para esclarecer el crimen del corresponsal de
Televisa.
Dijo que todavía no contaba con los elementos suficientes para informar el móvil de ese
crimen y señaló que será hasta este sábado cuando pudiera saberse qué fue lo que pasó.
Consultado vía telefónica ayer por la noche consideró que el asesinato de Ramírez “es un
hecho lamentable. Me pesa mucho por el reconocimiento que tenía como comunicador y
porque era amigo mío”.
Respecto a qué lectura deja ese hecho, Chavarría expresó que ésta “no sólo es para el
gobierno, sino para la sociedad, es una circunstancia indeseable. Lamentablemente no se
ha podido erradicar la violencia en la entidad”.
Del posible móvil Chavarría indicó que no contaba con los elementos suficientes para
poder confirmar algo en específico, “pero vamos a ponerle mucho empeño para que se
pueda esclarecer el caso y castigar a los responsables”. “Ahorita se están haciendo las
investigaciones correspondientes por parte de la Procuraduría de Justicia”, dijo.
En tanto, en Chilpancingo Montufar Mendoza confirmó el hecho, dijo que el crimen se dio
poco después de las 7:30 y según los primeras investigaciones fue atacado por un hombre
de 1.80 metros de alto. Detalló que Ramírez alcanzó a correr herido de muerte hacia el
hotel California donde finalmente expiró.
Al lugar del atentado llegaron policías de la Agencia Federal de Investigaciones, de la
Federal Preventiva, estatales y de la Preventiva Municipal, así como reporteros, familiares
del periodista y decenas de acapulqueños y turistas que se arremolinaban para ver la
escena. El cuerpo fue cubierto con una sabana blanca.
Hasta las 3 de la mañana de hoy el Servicio Médico Forense aún no informaba oficialmente
del número de impactos que habían quitado la vida al periodista.
Ramírez era originario de Tlacamama, Oaxaca, tenía más de 20 años trabajando como
corresponsal de Televisa y 50 años de edad. Le sobreviven su esposa y dos hijas.
Fue reportero de Novedades de Acapulco, jefe de prensa del IMSS, de donde saltó a la
corresponsalía de Televisa, además de director y conductor del noticiero Al Tanto.